La Fundación Nacional del Sueño nos ofrece una serie de soluciones para esas noches que no sabes qué hacer y estás deseando quedarte dormido.
Leer un libro
Hacer algo relajante -como leer un libro o escuchar música – antes de acostarnos, es una idea muy eficaz dice la Revista Muy Interesante. La relajación de esta actividad ayudará a que nuestro organismo se prepare para el descanso nocturno.
Apagar/silenciar el móvil
Lo ideal es desconectar todo tipo de dispositivos electrónicos de corto alcance, ya sean tabletas, portátiles , móviles u ordenadores, para que su luz no active ni altere nuestro cerebro y podamos conciliar el sueño con normalidad.
Ejercicios de respiración
Para calmar la mente, nada mejor que un ejercicio de respiración o relajación. Y es que cuando estamos preocupados por no poder dormir nuestro cuerpo segrega más hormonas del estrés (cortisol) que únicamente conducen a que nos sea más complicado relajarnos y con ello poder dormir. Para calmar esa ansiedad, la meditación o la relajación muscular progresiva, centrándonos de forma individual en relajar cada parte de nuestro cuerpo, nos ayudarán a ello.
Levantarse a la misma hora cada día
Eso nos ayudará a ajustar nuestro reloj interno y a conciliar el sueño con mayor facilidad por la noche a pesar de que alguno de esos días nos sintamos cansados por la mañana. El beneficio es a largo plazo.
FUENTE | http://www.mdzol.com/